Cuento corto 58 — Solo recuerda el vacío
Mi lengua se mueve más rápido que mi cordura
Pronuncia tu nombre bajito
Rompiendo todas las razones que usé de cerradura
Devolviéndome a un pasado presente
Ausente del tiempo que fue destierro de tu presencia
Primero me envuelve tu olor
Coloreando mi nariz de gratos momentos
Moviendo mis pies, posando mi cabeza
En el eco de tu cuello aspiro con cautela
Temeroso de perder sutiles tonos de miel y madera
Tu voz se volvió el susurro de un trueno
Con promesas dudosas de tormentas y humedades
Retumban en los acantilados de mi memoria
Tintineos de una risa que ya no tiene gracia
Tus recuerdos llegan como lluvia en primavera
Entre gota y gota busco no mojarme
Me guaresco de este chubasco inesperado
Mientras espero que el sol seque la tarde
Pero esta lluvia es majadera y solo quiere empaparme
La lluvia se sala en mi rostro
Al abrirme paso al cielo abierto
En el apuro por llegar a techo nuevo
Resbalé y mi boca gimió sin sosiego
Lengua eso tienes por traicionera
Solo dolor y verbo mendigo
Aprende a no mencionar su nombre
Solo recuerda por nuestro bien
Solo recuerda el vacío